Si eres un conductor habitual sabrás que no siempre es posible evitar algunos pequeños roces o golpes por la calle. No es lo habitual, pero a lo largo del año es posible encontrar algún problema. En determinadas ocasiones, esos golpes suponen una abolladura que puede ser más o menos importante. En nuestro taller de chapa y pintura en Pinto hemos visto todo tipo de golpes. Normalmente, las personas que traen su vehículo hasta nuestro taller es para arreglar un golpe importante en la carrocería.

Sin embargo, con los golpes más pequeños no solemos prestar tanta atención. Lo ideal es tener el coche en perfectas condiciones. Y para eso es mejor acudir a un taller. Pero si no puedes llevar tu coche, también puedes utilizar algún truco para solucionar esos pequeños golpes.

Calienta la zona afectada con un secador de pelo. Pero cuidado con no sobrecalentar que la pintura se puede estropear. A continuación aplica aire comprimido licuado. Con ese cambio de temperatura la superficie pasará de expansión a contracción. Cubre la superficie abollada hasta que se cubra. En unos momentos la plancha se habrá enderezado. Cuando desaparezca la espuma puedes limpiar los restos. Pero ten en cuenta que esto sirve solo para abolladuras pequeñas.

No obstante, si quieres que tu coche luzca con el mejor aspecto después de un golpe te aconsejamos que nos lo traigas a nuestro taller de chapa y pintura en Pinto.

En Talleres Manuel Hurtado vas a encontrar a un equipo de mecánicos con gran experiencia. No importa el golpe que tenga tu coche o la pintura que falte. Nosotros nos encargaremos de arreglarlo.